DGTL Barcelona 2018 era una cita imperdible para todo nuestro equipo. El festival holandés volvía al Parc del Fòrum de Barcelona por cuarto año consecutivo y, allí, le esperábamos con los brazos abiertos toda la gente que conformamos el equipo de Xceed. Cada uno con sus gustos y sus manías; cada uno, con sus preferencias. ¿Qué fue lo mejor del fin de semana? ¿Coincidimos unos con otros? Veamos…
Luca
¡Preparados, listos, ya! Ben Klock en el Generator fue una decisión difícil, ya que Adriatique estaban a la vez en el Modular. No es habitual ver a Ben Klock bajo la luz de sol (salvo que sea a las 6am en un escenario abierto como el del Sónar), pero el alemán supo gestionarlo perfectamente para entrar en sincronía con el público y el momento. ¡Me encantó! Luego, nos marchamos al Modular a ver a DJ Tennis. Hacía 10 años que no veía a Manfredi pinchar y, aunque no fue mi actuación favorita, la disfruté. Como éramos un grupo grande de gente (logramos permanecer juntos durante casi todo el festival, algo tremendo), tuve que ir a buscar a los que se fueron a ver a Black Coffee para juntarnos de nuevo ante Dixon (de nuevo en el Modular). La idea era verle empezar y, luego, cerrar el día con Ben UFO y Job Jobse. Tal cosa no sucedió. Dixon nos conquistó con un set impresionante que fue, sin duda, lo más destacado del Día 1 de DGTL Barcelona 2018.
El sábado, aún entré incluso más tarde al festival, sobre las 21h, y pronto me di cuenta de que no era el único que quería “descubrir” a Amelie Lens. El Generator estaba a rebosar. Me gustaron los primeros 30 minutos. Luego, la música de Amelie empezó a aburrirme, así que aproveché para descubrir las áreas del festival que aún no había visto durante la primera jornada; entre ellas, el Frequency. ¡La primera impresión fue de puro amor! Pional y Fort Romeau lo estaban petando. De lejos, la mejor actuación de todo el festival. La cereza del pastel la puso Pional con su ‘Tempest’. ¡Mágico! También descubrí allí ‘Plastik’ de Super Flu y Victor Talking Machine. ¡Echadle un ojo! Éramos un grupo más pequeño esta vez y, a las 2am, ya habíamos hecho el check, en este orden, a Motor City Drum Ensemble, Oscar Mulero, Rødhåd, Jamie Jones y Maceo Plex. MCDE estuvo divertido, como siempre, con sus ritmos disco cargados de groove. Mientras, en el Generator, la cosa se ponía seria y la gente enloquecía con Oscar Mulero, primero, y Rødhåd, después. Llegó la hora de Jamie Jones. Le había visto anteriormente en el Time Warp este mismo año (escuchad su sesión de entonces en Soundcloud, pues para mí fue la mejor del festival alemán), lo que me hacía ir con altas expectativas. Salí algo decepcionado: no fue un mal set, pero tampoco nada memorable. Finalmente, decidimos terminar el festival con Hot Since 82, quien recuperó nuestra fe en él tirando uno de mis temas favoritos de toda la vida: Born Slippy de Underworld. ¡Imposible pensar en un fin de fiesta mejor!
Wyan
Como residente en Barcelona, he asistido a muchos eventos en el Parc del Fòrum (¡mi mejor momento allí siempre será el concierto de Daft Punk en el Primavera!). Me impresionó cómo DGTL supo darle su toque personal al espacio y generar así una experiencia única. La decoración basada en la iluminación LED y las estructuras metálicas futurísticas invitaban a formar parte de la historia, sin olvidar las instalaciones de arte entre los escenarios, ideadas para el entretenimiento en el camino entre cada uno de ellos y para permitir brillar a los artistas locales. El line-up estaba diversificado, pero era de primer nivel, adecuado para satisfacer todos los gustos. Llegué un pelín tarde y acompañado por mi novia, una gran fan de Solomun. Vimos la primera mitad de Black Coffee, cuya paciencia me dejó impresionado, pues su sesión fue lentamente en ascenso. Eché de menos su clímax habitual, aunque la gente seguía comiendo de su mano, como de costumbre. Luego, queríamos ir a ver a Job Jobse y Ben UFO, pero fue imposible. Los sonidos melódicos de Dixon eran cautivadores. Parecía que estuviera pinchando en su casa para unos pocos amigos y no ante decenas de miles de personas. Lo siguiente que recuerdo es a mi novia tirándome del brazo para ir a ver a Solomun. Desafortunadamente, tras haberle visto en varias fiestas diurnas, no fuimos capaces de meternos en su set festivalero, más duro de lo habitual y sin componentes vocales. Lo dejamos estar tras un par de copas y cerramos DGTL Barcelona 2018 con Dixon… siendo, simplemente, Dixon.
Dede
Fue un gran acierto decidir movernos al escenario Frequency llegado cierto punto del festival. Me fascinó la actuación en formato live de los Tuff City Kids, trasladándonos a otra dimensión. Ellos fueron los mejores del primer día. En cuanto al resto, sólo diría que Ben Klock sigue siendo uno de mis DJs favoritos y que Dixon, en esta ocasión, no me gustó tanto como de costumbre.
Ghezio
Por desgracia, sólo pude ir al festival el primer día. En primer lugar, debo decir que fue mi primera vez en DGTL Barcelona 2018 y debo admitir que fue bastante impresionante, especialmente por sus dimensiones y su buena organización. Los escenarios (especialmente el Modular) eran increíbles, sobre todo por la noche. Musicalmente, Apollonia fue el camino ideal para iniciar la aventura. Ben Klock, en mi humilde opinión, fue demasiado para un viernes por la tarde, aunque adoro su estilo. Por el contrario, DJ Tennis fue difícil de tragar al principio, aunque lo disfruté mucho al final (era la primera vez que lo veía en directo). De allí, nos fuimos a Black Coffee. Gran performance, en la que varias vocales de sobras conocidas fueron remezcladas con mucha clase antes de que cerrara su set y diera paso a los últimos nombres de la noche.
Vicky
Mi primera vez en uno de los festivales más afianzados de la escena, el DGTL Barcelona 2018. Desde que entré, tuve la impresión de estar en una gran rave, rodeados por grandes contenedores, colores electrizantes y gente entusiasmada por la electrónica y cargada de aires de libertad. A parte de haber escuchado a algunos de los mejores DJ sets en los distintos escenarios, mis destacados son para todo lo que me fui encontrando mientras caminaba entre stages. Una serie de instalaciones creadas por artistas locales hacían que uno quedara inmerso en una diferente pero extraordinaria experiencia musical. Espacios con luces y flashes colgando de las estructuras superiores y columnas con sistemas de sonido impactantes hacían notarse la gran producción y el diseño artístico que hacen de DGTL un festival distinto al resto de los que asistí durante el verano.
Fran
Perdonadme por ser tan tozudo con el techno, pero para mí fue imposible irme del Generator. Los implacables y descomunales drum kicks del paredón de Funktion-One llenaron mi cuerpo de grooves, impidiendo que me fuera. Llegué un poco tarde el viernes, así que me perdí el live de FJAAK. Por suerte, el memorable set de 3 horas de Ben Klock, dado de una precisión que sólo gente como Ben puede alcanzar, lo compensó. El cierre de Dax J tampoco podré olvidarlo nunca. Bomba tras bomba, sus sonidos raveros, tranceros y familiares también con el jungle casaron a la perfección con las bases techno, dándole un sabor poco común y desatando la locura en la pista.
Tras descansar un poco, el sábado me planté en el festival a primerísima hora (15h). Bajo un sol abrasador, la gente de HEX Barcelona se marcó un destacable set de warm-up para calentar a la pista. Bambounou, con un techno vibrante e incluso con algún que otro tema house, influenciado por sus orígenes africanos, dejó el listón bien alto. Y eso que las estrellas del fin de semana estaban aún por llegar… Oscar Mulero y sus incomparables habilidades tanto en la ecualización como en la selección perturbaron nuestras mentes con oscuras y siniestras texturas. Hablamos de un verdadero caballero que sabía perfectamente que no corría a su cargo el cierre del festival, así que, tras dejarnos noqueados con una buena dosis de duros beats, bajó el ritmo durante la última media hora, justo a tiempo para dejarnos respirar antes de la última actuación. Rødhåd y su perenne techno lleno de loops, capaz de elevar siempre a cualquier público a un nivel superior, fue ideal para ponerle el punto final a DGTL Barcelona 2018. Poderoso, hipnotizante y de kick drum aplastante, justo como a mí me gusta.
Paco
Soy un aférrimo amante de las actuaciones en formato live, pero debo decir que me llevé una de las grandes sorpresas durante el DJ set de Honey Dijon el sábado en el escenario AMP. Me esperaba algo más de música house, pero la superposición de voces soul (ahí se huele claramente su origen estadounidense) sobre bases techno me dejaron boquiabierto. La gente se entregó a su estilo, un estilo que no acostumbramos a tener muy a mano por aquí. Aunque, como decía, los lives son mi perdición. ¿Sorpresón? Lo tuvimos con Perel. La alemana inauguró la tarde del sábado en el Modular con un exquisito viaje musical a través de los sonidos característicos de Innervisions, aunque con una constancia y una horizontalidad impropia de los géneros melodic techno. Lógicamente, pudimos disfrutar de ‘Die Dimension’, su gran obra maestra. Otros directos que pudieron con mis sentidos fueron los de Detroit Swindle a seis manos (y ante un set-up de miedo), Tuff City Kids (unión de Lauer y Gerd Janson) y FJAAK (el trío de Berlín que está revolucionando la escena techno).
El aspecto más destacado del DGTL Barcelona 2018, sin embargo, fue el excelente criterio bajo el que programaron varias sesiones en formato b2b. A muchos les llamaba especialmente la atención la unión de Carl Craig y Cassy, pero yo no pude resistirme a vibrar muy fuerte con los tres que nos aguardaban en el Frequency (mi escenario predilecto). Ben UFO y Job Jobse están en la cumbre de mi ranking personal (me parecen súper selectores) y no es habitual verlos juntos sobre un escenario. No podía perder la ocasión y no lo hice. Fue una gozada. ‘Neutron Dance’ y ‘Automatic Dub’ eran dos temas que sabía que iban a sonar (y así fue). Otro de los tracks que esperaba con ganas era el ‘Tempest’ de Pional, que apareció durante el b2b del madrileño junto a Fort Romeau (también otra de las actuaciones más destacables del fin de semana). Quizá esperaba algo más de Antal y Palms Trax, que abusaron del house y del disco y protagonizaron un set demasiado alegre para una sesión nocturna. Pese a ello, el Frequency (que es donde pasé la mayor parte de mi tiempo) se dejó las zapatillas bailando, al igual que el público del resto de escenarios con los más grandes nombres, como Dixon, Maceo Plex, Oscar Mulero o Hot Since 82.
Música para todos los gustos. DGTL sigue pisando fuerte y ya camina hacia su quinta edición en Barcelona (23 y 24 de agosto de 2019) y su primera en Madrid (5 de diciembre de 2018).
(Imagen de Portada: © Oriol Reverter)
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