La única constante es el cambio. La evolución de la música de baile y el gusto de Pablo son prueba de ello. Los años que vivió en Bristol, el tiempo compartido con el colectivo Soul Spektra Sound y sus viajes, guardan tanto un sitio en su corazón como en su maleta de discos. Estas referencias se ven reflejadas en sus sesiones, donde sería injusto encasillarlas en un mismo estilo o género. Orientado a la pista de baile, a veces tropical, otras ácido. Se desenvuelve bien en fiestas diurnas y en clubs de techos bajos. Siendo un antiguo habitual en los clubs emblemáticos de Madrid, Pablo se mantiene activo actualizando su colección de discos para ocasiones como ésta, en la que siente al berlinClub como su casa.