Construido originalmente como fábrica para Lipton, Lyle's se encuentra en el edificio del té de Shoreditch, que sobrevivió al Blitz. La decoración conserva una mezcla de utilitarismo y suelos de hormigón brutalistas. El menú diario, breve y dulce, es microestacional, y muestra lo mejor de cada día en Londres y el Reino Unido; la carta de vinos hace lo mismo. La atención al detalle comienza en el origen y la colaboración con los productores es clave: el pescado se envía por correo desde Cornualles, mientras que cada semana en verano el equipo de Lyle's se desplaza a la costa sur para recoger fruta.