Casco Viejo: Es el corazón histórico de Bilbao y un gran lugar para empezar a explorar la vida nocturna de la ciudad. Las calles están llenas de tabernas típicas que sirven sabrosos pintxos y vinos locales. Algunos de los lugares más populares del Casco Viejo son la Plaza Nueva, el Mercado de la Ribera y la zona de las 7 Calles.
Indautxu: Este barrio alberga algunas de las discotecas más populares de la ciudad, como Fever y Kafe Antzokia. También es un buen lugar para disfrutar de la música en directo en locales como Bilborock y Stage Live.
Abando: El barrio de Abando está situado cerca del centro de la ciudad y alberga varios bares y discotecas de moda, como Shake and Roll, Txitxiburduntzi y Café Antzokia. Esta zona también cuenta con una gran variedad de restaurantes y cafés, lo que la convierte en un lugar ideal para pasar la noche.
Uno de los lugares más populares para la música electrónica en Bilbao es la Sala Sonora, que tiene eventos regulares con DJs internacionales y talentos locales. El local tiene capacidad para unas 500 personas y cuenta con un sistema de sonido de alta calidad que proporciona una experiencia envolvente para los amantes de la música. La Sala Sonora es conocida por su compromiso con la escena underground, ya que configura una plataforma para que los DJ emergentes muestren su talento.
Otro lugar popular donde vivir la música electrónica en Bilbao es la Sala Stage Live. Este club tiene capacidad para unas 1.200 personas y acoge regularmente eventos con DJs internacionales y actuaciones en directo. Stage Live también cuenta con una terraza en la azotea, un lugar único para bailar toda la noche bajo las estrellas. Para aquellos que buscan un ambiente más íntimo, la Sala Azkena es también una gran opción. Este club subterráneo tiene capacidad para unas 200 personas y ofrece un ambiente cercano y underground. Este local es conocido por su compromiso con la escena musical local y su dedicación, ofreciendo una experiencia única y memorable a sus clientes.
La escena rave y underground de Bilbao no se limita a la música electrónica. La ciudad cuenta con una floreciente escena punk y metal, y salas como la Sala Bilborock y la Sala Edaska acogen con frecuencia eventos con bandas locales e internacionales.