Si nos preguntaran por UN bar al que ir en Barcelona antes de ir a una discoteca, siempre recomendaríamos L’Ovella Negra. Es… un clásico no, lo siguiente. Estamos ante un imprescindible, un lugar de culto para los maestros cerveceros de la Ciudad Condal. L’Ovella Negra es una macrotaberna de grandes dimensiones, largas mesas corridas y altos techos. Birras, copas, algo de cenar, música y jaleo de fondo y listos para ir a la discoteca de turno (Razzmatazz está a apenas cinco minutos a pie). ¡Ah! Y sus precios no son para nada caros. Difícil venderlo mejor, ¿verdad?