Donde antes se encontraba el It Café, se ha establecido uno de los rincones más frecuentados por las almas más recurrentes de la noche barcelonesa. Una gran variedad de cervezas y cócteles invaden su carta, aunque toda Barcelona estará de acuerdo en que son sus butacas y sofás vintage (arduo numerosos) y su tono desenfadado, dejado y, a su vez, moderno y con mucho estilo, lo que hace de 33|45 un must para cualquiera que se sienta cómodo entre cócteles, risas, voces de aire joven y beats de electrónica experimental y alternativa. ¡El mítico dj Marc Piñol incluso ofreció una sesión allí!