Del 13 al 15 de noviembre, Madrid se convirtió en la capital global de la nueva cultura de club con la llegada de Jägermeister Night Embassy a la ciudad por primera vez. Durante tres noches, música, comunidad y libertad creativa se fusionaron en un espacio donde la escena local pudo reinventarse sin filtros, sin fronteras y con total autonomía artística.
En pocas palabras, un laboratorio vivo de la noche: un lugar diseñado para la experimentación, el diálogo y la expresión colectiva. XCEED tuvo el placer de formar parte de Night Embassy Madrid en primera persona (no solo como partners de ticketing, sino también como amantes de la música), así que aquí va nuestro recap.
Jueves con Casa Pepa: Abriendo con una doble visión
La primera noche estuvo comisariada por Casa Pepa, con una inauguración profundamente arraigada en la identidad castiza de Madrid, pero completamente reimaginada para la nueva generación. El colectivo, conocido por fusionar el espíritu urbano tradicional de la ciudad con la nueva cultura club, preparó una noche con artistas y residentes como Popi, Brava, Poniboy, Lucía Reina y L0rna. Una mezcla de electrónica, reggaetón, trap y todo lo que existe entre medio, en plena sintonía con la esencia de Casa Pepa.
Los Creative Encounters comenzaron con Challenges of Nightlife Safety, que contó con voces de Fabric London, Karne Kulture y más. Una conversación necesaria sobre cómo construir ecosistemas nocturnos más seguros e inclusivos.
Mientras tanto, las Expression Stations arrancaron de la mano de Kura, Valium, Cirenia y Keperezaxiko, que aportaron arte para uñas, joyas dentales, maquillaje y DIY a medida, convirtiendo el espacio en un lienzo vivo.
Viernes con Enigma: Protecting the Dolls
La noche del viernes estuvo en manos de Enigma, que trajo su visión característica: un club sin etiquetas. Conocido en el underground madrileño por su programación queer y su identidad deslenguada, el colectivo creó una noche que capturó esa esencia tan necesaria en la capital española. Las locales perfectas como Olvido y Fukcnormal se unieron a internacionales como u.r.trax, construyendo una narrativa que atravesó géneros como house, funk, groove y mucho más.
Esta vez, Nítido lideró la charla con una conversación sobre la importancia de documentar y proteger la memoria de la escena nocturna. Y talleres como el de danza experimental de Héctor Fuertes añadieron nuevas capas de significado a la noche.
Sábado con Antídoto: Cerrando con un ambiente potente
En la noche final llegaron los imprescindibles de cada jueves en la ciudad. Antídoto Club puso la guinda al combinar bajos, sonidos con influencia UK, latin-club, funk, reggaetón junto a Shifa Ligero, Tiffany Calver, los fundadores Yosef y Diego Armando, Marcelo Pantani y la voz de Simona, moviéndose con soltura entre escenas, géneros e identidades.
En el plano educativo, Karne Kulture volvió con una sesión fundamental sobre protocolos reales de seguridad, herramientas y marcos de actuación, insistiendo en que una cultura de club segura exige responsabilidad continua.
Un nuevo plano para la noche
Se sintió que Night Embassy Madrid estaba un paso adelante hacia la vida nocturna que buscamos: más segura, más expresiva, más colaborativa y profundamente arraigada en la identidad local.
Impulsada por Jägermeister, Night Embassy ha viajado por el mundo desde 2019, adaptándose a cada ciudad mientras defiende su esencia: freiraum — un espacio libre y creativo donde las comunidades pueden crecer. Madrid abrazó esa visión con toda su fuerza.
El mensaje de Night Embassy fue claro y contundente: la noche pertenece a todos, y cada uno puede definir su propia versión de ella.
